Celebramos y cantamos nuestras maneras de nombrar.
Celebramos y cantamos nuestras maneras de nombrar.

Queremos recuperar nuestro futuro y queremos hacerlo imaginando un mundo común en el que seamos capaces de atravesar lenguajes, haceres y capacidades diversas, reconociendo en todas ellas el potencial que tienen para elaborar otras narrativas, para aprender conjuntamente otras prácticas, que transformen y nos transformen.
En esta cuarta sesión, el viernes 28 de mayo, nos reunimos en SERCADE para recoger nuestras banderas, nuestros mapas y nuestro Madrid y nos dirigimos caminando hacia el Museo Reina Sofía para una nueva sesión de trabajo colectivo que, en esta ocasión, se organizará en torno a una merienda sobre la hierba del precioso jardín interior del Edificio Sabatini.
Utilizando como manteles cinco mapas impresos en hule de la ciudad y recuperando como ingredientes los lugares, experiencias y situaciones identificadas en su capacidad para tejer las vecindades y vecindarios ocultos e invisibilizados de Madrid, nos damos como tarea – en cada comisión – contarnos, cantarnos y celebrarnos componiendo e interpretando un pequeño himno, una canción que nos sirva para dar la bienvenida a las personas que acaban de llegar a la ciudad.
Asamblea y puesta en común previa a la sesión realizada en el jardín del Reina.
¿Cómo abrir caminos que nos permitan vivir de otra manera? ¿Cómo tejer una existencia contra obstáculos materiales, afectivos o culturales?
Como ya hemos dicho, uno de los objetivos del programa Un botiquín para mi ciudad tiene que ver con elaborar y dar visibilidad a discursos, imaginarios y representaciones alternativas acerca de las personas migradas, dando lugar a que sean ellas mismas – junto a otras cualesquiera que quieran sumarse – quienes definan los términos en que se enuncian y construyen estas imágenes, a través de las cuales se dan a conocer, incorporando códigos, formas de decir y experiencias que estén situadas en su cotidianeidad.
Como dice Marina Garcés, a quien tendremos en la sesión de presentación pública del botiquín “en este camino siempre hay lagunas y heridas, lo importante no es resolverlo todo, sino tener maneras de acoger estas lagunas y heridas y convertirlas en vacíos que nos permitan descubrir, desplazarnos, respirar, ir al encuentro” (1).
Así, en esta merienda musical, nos contamos cómo es el Madrid que soñamos, el Madrid que queremos hacer y traducimos nuestros deseos en esta canción o cántico que, además de ser un nuevo himno para un Madrid más acogedor, pueda representar qué es aquello que significa curar la ciudad en relación al área de trabajo de nuestras comisiones y en relación a los saberes y poderes de las personas que las conformamos.
Las comisiones trabajando sobre sus mapas-mantel durante el Picnic en el Jardín del Reina.
Este chulo botiquín
(Himno)
En este chulo botiquín (botiquín, botiquín)
Me siento bien y disfruto (disfruto, disfruto)
En un espacio creativo, la vida es estupenda
Bailando al ritmo de Lavapiés
Bailando al ritmo de Lavapiés
Mis retos son tus retos, mis logros son tus logros
La creatividad sostenible nos hace más libres
Bailando al ritmo de Lavapiés
Bailando al ritmo de Lavapiés
¡Chiqui-cha!
Bienvenido a Madrid
Tu casa es mi casa, entra por la puerta
¡Pasa, pasa!
Bienvenido a Madrid
¿Qué te crees?… ¿que esto es solo una canción?
Que no, que no… ¡que no, que no!
¿Qué te crees?… ¿que esto es solo una canción?
Es nuestro mensaje de bienvenida
Resuena en las calles y en las avenidas
Queremos que sepas que aquí se te espera
Se te quiere, se te siente
Todo tu trabajo
Todo lo que entregas
No, no seas indiferente
Madrid sin ti, no es ya Madrid
Porque esta ciudad es grande
Gracias a ti, y a ti, y a ti
Bailando al ritmo de Lavapiés
Bailando al ritmo de Lavapiés
En este chulo botiquín (botiquín, botiquín)
Me siento bien y disfruto (disfruto, disfruto)
En un espacio creativo, la vida es estupenda
Mis retos son tus retos, mis logros son tus logros
La creatividad sostenible nos hace más libres

Celebramos y cantamos nuestras maneras de nombrar.