Haciendo Plaza
HACIENDO PLAZA
Haciendo Plaza es un proyecto realizado en 2018 en el marco de Imagina Madrid, programa de Intermediae, impulsado por el Área de Cultura y Deportes del Ayuntamiento de Madrid.
A lo largo de 2018, los vecinos y vecinas de Valdezarza vieron cómo la plaza de su barrio se sometía a una renovación y lograba por fin tener el nombre que tanto tiempo llevaban reclamando. Así, la que hasta entonces había sido popularmente conocida como la “Plaza del Ahorramás”, pasó a denominarse oficialmente Plaza Lugar Poetas, un nombre que rinde homenaje a la memoria del propio barrio que, durante años, acogió en sus calles y plazas a intelectuales y poetas.
Desde Cocinar Madrid –una de las patas del proyecto Haciendo Plaza, que forma parte de Imagina Madrid, un programa de Intermediae impulsado por el Área de Cultura y Deportes del Ayuntamiento de Madrid, que apuesta por explorar nuevas formas de intervención en el espacio público e imaginar la ciudad que queremos habitar– tuvimos el honor de acompañar a los vecinos y vecinas del barrio durante estos meses de cambios en la plaza, valiéndonos de la cocina como una herramienta para conocer qué se cocía en el barrio. Para ello, en el mes de mayo, construimos dos flamantes cocinas con la ayuda de Enorme Studio y los vecinos y vecinas de Valdezarza, que estrenamos en la plaza por todo lo alto en el mes de julio.
A través de los diferentes talleres que hemos organizado tanto en la Plaza Lugar Poetas como en el Centro Comunitario Guatemala –actual hogar de las cocinas móviles– hemos tratado de ir trazando la memoria culinaria del barrio, hemos explorado la relación que desde la ciudad tenemos con el campo, hemos conectado distritos y establecido alianzas con otros proyectos que tenían lugar en Madrid, como los talleres infantiles realizados con el Colectivo Mico o el programa Grigri Pixel.
A lo largo de todos estos meses, hemos aprendido que, cuando se trata de cocina, todo el mundo tiene un saber que compartir, hemos demostrado que la cocina puede ser una gran herramienta de dinamización y encuentro vecinal y, sobre todo, hemos disfrutado del placer de cocinar y comer juntos en plena calle.
«construcción de cocinas»
Durante un fin de semana del mes de junio, construimos las dos cocinas móviles y un colorido toldo con el que protegernos del sol en los días más calurosos. Desde muy temprano, el Colegio Público Eugenio María De Hostos se llenó de actividad: los integrantes de Enorme Studio organizaban los materiales de construcción y las herramientas y distribuían las tareas entre las numerosas manos voluntarias que vinieron a echar un cable; las chicas del colectivo Mico reunían a los más pequeños para proponerles actividades y descubrirles, por ejemplo, que el mundo se puede ver de diferentes colores dependiendo de las gafas con las que lo mires o que con la fruta se pueden hacer construcciones increíbles. Además de poner tornillos, cortar listones, pintar las cocinas y decorar el toldo, también disfrutamos de una riquísima comida. Y allí, entre gazpachos y ensaladas, las vecinas y vecinos compartieron con nosotras sus anécdotas del barrio.
«cocina tu historia»
En el mes de julio, ¡por fin estrenamos las cocinas móviles! La puesta de largo tuvo lugar en la plaza con un taller en el que invitamos a los vecinos y vecinas de Valdezarza a que compartieran alguna anécdota que nos ayudara a ir trazando la memoria culinaria del barrio.
Para ello, les lanzamos algunas preguntas: ¿Dónde iban a tomarse un helado cuando eran pequeños? ¿Y a hacer un picnic o a tomar el vermut los domingos? ¿En qué lugares solían hacer la compra? ¿Quién er su tendero de confianza? ¿Y el de sus abuelas? En este taller fue donde nació el ya icónico grito de ¡Valdezarza a la mesaaaa!
«cocina tu huerto»
50 kilos de verdura (procedentes del huerto de Remi en Polán, Toledo), más de 60 personas de todas las edades, dos cocinas, unas cuantas ollas y muchas ganas de aprender, contar y cocinar. Así comenzó la jornada del sábado 15 de septiembre en Valdezarza, donde vecinas y vecinos nos hablaron acerca de su relación con los huertos, el campo y los cultivos en general y en la que contamos también con productores de verduras y hortalizas ecológicas, que vinieron a compartir sus experiencias. Una de las máximas de los talleres de Cocinar Madrid es la improvisación culinaria, gracias a la cual pudimos disfrutar de una deliciosa receta de col rehogada con zanahoria rallada y ajo que preparó Isa, vecina de Valdezarza, y del increíble baba ganoush de Anwar –hecho con las berenjenas del Huerto de La Morera–, vecino libanés del barrio de Tetuán. Los más pequeños, junto al colectivo Mico, construyeron un invernadero y dibujaron verduras y hortalizas. Como recuerdo del taller, cada uno se llevó su propia maceta con una semilla plantada. Y antes de comer, Javi (del proyecto Los Esquimos) y otros músicos animaron la plaza con un concierto de dulzaina.
«cocina tu poética»
Amenazaba lluvia, así que para este taller tuvimos que cambiar nuestra querida Plaza Lugar Poetas por un lugar a cubierto. Y qué mejor sitio que el que acabaría siendo el hogar de las cocinas móviles: el Centro Comunitario Guatemala, en el distrito de Fuencarral–El Pardo. Para este taller, contamos con unos invitados muy especiales: los participantes del festival Grigri Pixel, que se celebraba en la capital en esos mismos días. Mientras nos poníamos manos a la obra para preparar el menú, Keba, uno de los artistas del Grigri, fue preguntando a la gente por anécdotas curiosas o divertidas que les hubieran ocurrido en torno a la cocina. Entre historias culinarias y tareas de cocina, todo el mundo sacó un hueco para escribirle unos versos al barrio de Valdezarza. Este taller, estaba dedicado al nuevo nombre de la plaza, así que quisimos rendirle un homenaje poético creando un cadáver exquisito de versos escritos por los asistentes. Por su parte, Mama, otra de las participantes del Grigri, se animó a prepararnos el célebre bissap o “vino senegalés”, una bebida sin alcohol a base de infusión de flor de hibisco que triunfó durante la comida. Sara Fratini estuvo retratando toda la jornada y nos dejó unos maravillosos dibujos.
«cocina tu distrito»
Entre chocolate caliente y castañas asadas, así transcurrió el último de nuestros talleres. Dado que el Centro Comunitario Guatemala se había convertido en la casa de nuestras queridas cocinas, quisimos hacer un taller que sirviera para unir los distritos de Moncloa–Aravaca y Fuencarral–El Pardo. Contamos con vecinos y vecinas de ambos barrios y con unos invitados inesperados: los niños y niñas que venían a pasar la tarde al Guatemala con sus monitoras y que se acabaron sumando al taller, demostrando ser unos increíbles pinches de cocina. Con todos los participantes hablamos sobre lo que les gusta comer y cocinar, sobre cuáles eran sus especialidades culinarias y sobre esas recetas que han pasado de generación en generación en sus familias. También les pedimos que nos escribieran algunas de sus recetas favoritas. Antes de sentarnos a cenar, no podía faltar el grito de “¡Guatemala, a la mesaaaa!”.